viernes, diciembre 09, 2005

El amigo bastardo….o secreto.

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Bueno fuera que me regalaran una arma de oro para eliminar a tantos pendejos en Navidad.

Porque esta mala manía aparece cuando uno trabaja en oficina, como me choca ver a la gente que solo se te acerca en esta época solo por interés, como siempre las secretarias son las que llevan la iniciativa en organizar esta pendejada.

“El amigo secreto”, no se pero el que inventó tal cosa debe ser un genio…en vender maní en el Estadio Monumental. No solo que imponen a otros cosas que en verdad de tu corazón no quiere salir, porque si no lo haces debes cumplir “penitencias” (tales boberías caen en lo absurdo de lo absurdo). Pues ya sin saberlo, en la oficina me inscribieron en tal pendejada, me choca porque si evades esta cosa te tildarán como el avaro más grande de la empresa.

Lo más imbécil es que debes dejar un pequeño presente a tu “amigo secreto” todos los días hasta que llegue la fecha oficial de entregar formalmente el regalo…pues yo ni verga voy hacer esta huevada, lo que puedo es dejarle una piedra como premio consuelo como en una época lo daba el pelamaso de Polo Baquerizo.

Esta es otra novedad que nos trae el mes de diciembre, porque niego que estos sea una tradición navideña.

Yo creía que nunca me iba a tocar tal pendejada, es como si uno evitara contraer Ebola y de repente al comerte un encebollado para el chuchaqui te encuentras que la rubia buenota que estaba al lado tuyo la tenía. Igual soy un cara dura y tal vez ni asista a tal pendejada o tal vez me hago el loco y digo que a mi no me han notificado de tal suceso.

Ahora solo falta realizar aquella fiestita que hacen de integración en la que gente que nunca te ha hablado durante el año se te pega como si fueran amigos entrañables y te den las mejores felicitaciones para la Navidad y el año Nuevo…raza de hipócritas.

No se porque aunque uno quiera pasar de lo más tranquilo en esta Navidad, siempre hay alguien que caga las fiestas con situaciones tontas o mementos cursis que solo quedarán en tu mente como una de las amargas experiencias que no quisieran que se repitiera.

Ya tengo malas experiencias en este tipo de integración, creo que fue cuando estaba en colegio, ya casi se habían ido todos y me acerque a una amiga con los efectos del trago encima y cuando estábamos bailando me convertí en un pulpo porque me salieron brazos de todas partes para agarrar lo que más podía de la chica y creo que le propuse algo porque da ahí para adelante me queda viendo como si yo fuera un depravado.

Bueno sin apartarme del asunto principal del post, yo creo que toda esta gente que organiza tales pendejadas nunca han tenido una infancia decente, porque esta en cada una de las personas el criterio de regalar o no algún presente a una persona que consideran, por lo demás lo más importantes es desechar la maldad y la hipocresía en este tiempo, ya que lo material se daña pero dignidad siempre será recordada.

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El regalo para un amigo secreto.

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