viernes, julio 22, 2005

Crónica de una salida anunciada.

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Chao loser

Ya se venía pronosticando la salida de este ídolo de barro, que no solo desde algún tiempo va de disparate en disparate, si no que a comienzos de años cuando llegó a Barcelona se producieron un sinnúmero de desaciertos que tuvieron al equipo en su peor momento luego de 8 años sin ver el título.

Hay un refrán que dice: Haz fama y échate a la cama...este es el caso del Nine Kaviedes, que después de haber metido como 50 goles en Ecuador tuvo el gran chance de triunfar en Italia, ahí con el cambio de técnico emigró a otros equipos de España donde por su actitud fue banqueado casi toda su estadía, aquí afianzó su estilo de vida de dedicarse más a las mujeres y el trago que a crecer como deportista. Regresó a Ecuador y su paso fue fugaz, se le dió otra oportunidad y se enrroló a un equipo de Inglaterra donde no logró llenar las expectativas. A comienzos de este año pasa a Barcelona y comienza una primera fase de debacles que por milagro y por la casta de algunos jugadores llega a la final del Torneo Apertura.

Pero el hecho que derramó la gota del vaso fue que cuando fue excluido del segundo tiempo del partido contra Liga, se fue puteando a medio mundo como si el tuviera inmunidad para no ser cambiado procediendo luego sin previo aviso dejar la concentración al mismo estilo como lo hizo cuando hace algunos años se realizó la final Emelec-Liga.

Antes le había caído a puñetes al hijo del Rey de la cantera en un entrenamiento (el único hecho que valió la pena en su estadía en Barcelona, pero debería ser él solo y no un poco de maricas que luego de que le pegó quisieron hacerle leña el auto).

De aquí el futuro de este jugador, es incierto ya que nunca quiso con corazón los equipos donde defendió sus colores, creó que debería ser escritor y publicar un libro titulado: Camino a la perdición ó Manual práctico para ser mediocre toda la vida.

Cierto...sigue chupando en Vinces con Paredes que tal vez un equipo de barrio de esa zona te pueda enrrolar por una jaba.

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