Esperan que pasen las cosas para reaccionar.
Ha pasado ya casi un año desde que aquellos emigrantes se ahogaron por Centro-América buscando el sueño de pisar tierras estadounidenses, tanto se dijo, se lloró y se investigó por este motivo pero al parecer de nada ha servido la fatídica suerte de los anteriores porque todavía siguen ovejas aventurándose a morir en tierras extrañas.
Pero los que llevan la batuta de esta pendejada (no por ser regionalistas) son la gente de la Sierra. No me explico como hay tanto cojudo en el país que se quiere ir con coyotes a morir por las huevas, venden todas sus pertenencias se endeudan con un chuchal de plata, luego se quieren ir engajados a esta odisea y aquellos que sobreviven y son deportados al entrevistarlos nuevamente responden con su cara de mamertos: “lo volvería a intentar”
Que clase de bestia inmunda regala la plata por las huevas a un coyotero para seguir valiendo tres atados de paloma, solo un descerebrado. En vez de eso porque no se reúnen como otros serranos y forman con ese capital una micro empresa.
Sin embargo culpa también tiene la Armada Nacional porque no detecta a tiempo que estas embarcaciones que están en malas condiciones zarpe a otras latitudes llevando el tráfico de humanos como si no fuera nada del otro mundo.
Ahora se encontraron 9 cuerpos en las costas de Manta y después de ver los cuerpos recién la Capitanía del Puerto de Manta fue a buscar en el mar si había más emigrantes…esta clase de huevada es como querer curar el cáncer con una curita.
Lo más sospechoso es que nadie responde sobre las investigaciones para detener a los coyoteros que desde hace muchos años hacen feria en la tierra del tuerto.
Sin embargo lo testarudo de insistir este viaje por parte de las víctimas hace que esta empresa de tráfico humano vaya con viento en popa…aquí realmente estos cabrones tienen toda la culpa de ser tan pendejos.
Aquí tranquilamente se puede hacer una versión de esta película.
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